San Martín de los Andes – Nuestra ciudad es por sí sola una tarjeta de invitación adonde pasar unas relajadas vacaciones, donde rodearse de naturaleza, disfrutar de ella en todas sus gamas. Sin embargo, así como en diferentes momentos del año las visitas de turistas se intentan aprovechar al 100% por parte del sector que trabaja y vive del turismo, quienes vienen a nuestra localidad no tienen demasiadas alternativas para disfrutar sacando las opciones que la naturaleza ofrece.
Este último fin de semana largo la cantidad de visitantes que se hospedan en cabañas en San Martín de los Andes llegó al 70% según los datos relevados por los entes oficiales. Sin embargo, mientras en las localidades cercanas hubo diferentes propuestas para el turismo, con el fin de renovarles la invitación cada año, nuestra ciudad pareció darle una vez mas la espalda a quienes intentan buscar en nuestra “aldea de montaña” una oportunidad de disfrutar la cordillera de otra manera, por lo que peligra el alquiler de cabañas en san martin de los andes, sin mencionar a quienes viven todo el año aquí.
En Aluminé se realizó este fin de semana la Fiesta del Pehuén, Villa en Junín con motivo de la Semana Santa al igual que todos los años el Vía Christi congregó a más de dos mil personas, ni hablar de la cantidad de gente que disfrutó en Bariloche la Fiesta del Chocolate con la barra de chocolate más grande del mundo y el cierre de la fiesta a cargo de uno de los grupos del momento como Márama.
San Martín en cambio pareció una ciudad vacía, a pesar de la cantidad de gente que llenó los restaurantes y las calles en algunos momentos solo para mirar vidrieras o pasear en galerías, hoy parecía una ciudad fantasma. Desde Cultura o Turismo no surgen ideas renovadoras no solo para los visitantes sino para los propios habitantes de esta “aldea”. Y no es de ahora, siempre San Martín parece ser esa aldea de montaña que no cambia a pesar de los años.
Habrá que conformarse con la Fiesta del Puestero, las Noches de las Artes, que cada edición se parece más a una feria de la Salada que a la idea original, o la Navidad Cordillerana organizada por un grupo de comerciantes cansados de ver como las ideas de armar algo para la gente son apoyadas y generadas por otros municipios y con éxito, o quizás el show de luces en el lago a fin de año.
Más allá de una salida a comer afuera, cuando la economía familiar lo dispone, no hay lugares para disfrutar. Matrimonios jóvenes o jóvenes que deciden no irse a otro lugar a estudiar, no tienen opciones para divertirse, para reunirse y disfrutar un fin de semana largo.
La necesidad es real, existe y se espera que desde los lugares competentes surjan ideas que, no solo hagan volver a los turistas, sino que sean compatibles con las ofertas que la naturaleza ofrece. Los reclamos se pueden leer en cada red social o cada posteo de muchos de los habitantes que reclaman un cambio, habrá que esperar que aquellos quienes están al frente de llevar las riendas de nuestra ciudad tomen las medidas correspondientes.
